Proyecto llave en mano de este atico situado frente a la bahía de Palma de Mallorca, con unas espectaculares vistas al Mediterráneo y una terraza de 150 m2, este piso de tres dormitorios combina la piedra natural y el roble para unificar espacios. La reforma fue integral: se eliminaron pasillos y recovecos, se unificó el salón, el comedor y la cocina en una gran habitación central volcada al mar y se mezclaron diseños del estudio, confeccionados por carpinteros y marmolistas locales, con otros icónicos de Achille Castiglioni, Vibia, Flos o Brokis. Solo el terrazo de Huguet y la madera de iroco de la mesa exterior rompen la armonía de colores arena, blancos, crema y madera natural de esta luminosa casa pegada al mar.